Marco
- Existe poca planificación de la formación por parte de las empresas en base tanto a las necesidades reales como a las futuras.
Muchas de las empresas no disponen de una estrategia formativa.
Las pequeñas empresas turísticas tiene poca visión sobre la importancia estratégica de la formación.
Se suelen cubrir necesidades presentes, no futura.
Oferta formativa no adaptada a las necesidades reale.
Existe poca sensibilización hacia la importancia competitiva de la tecnología.
Estacionalidad genera incompatibilidades en fecha y horario.
Baja motivación del personal. Percepción de obligació.
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Falta de tiempo de los recursos humanos.
- La evolución del sector turístico ha generado nuevos perfiles profesionales y nuevas necesidades formativas.
Plan de Acción
Debemos implicar al profesional en el cambio.
- Hacer un estudio de necesidades formativas es algo más que recomendable.
Existe la necesidad real de una correcta planificación de la formación en la empresa.
Hay que ofrecer orientación docente y gestión del conocimiento turístico.
Disponer de una formación dinámica y adaptada a las necesidades reales del mercado.
Soluciones e-learning adaptadas a los nuevos perfiles profesionales.
Optar por contenidos de corta duración para la actualización continua (30-60 horas online)
- Buscar asesoramiento en una empresa especializada en formación para el sector, no un generalista.
Diseño de itinerarios formativos modulares que permitan el desarrollo de los profesionales en la organización. Gestión del talento para crecer.
- Orientación de los planes de carrera en la empresa para cubrir nuevos puestos y fidelizar perfiles de proyección.
Artículo publicado por Juan Jose Correa
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